¿Árbol natural o árbol de plástico?

Lo primero que deberías preguntarte es si necesitas este tipo de adorno, pero si en tu casa es costumbre poner el árbol de Navidad y además te preocupa el medio ambiente, tal vez te hayas preguntado cuál de las dos opciones es la más sostenible.

El árbol de plástico tiene la ventaja de que se puede utilizar numerosas veces. Sin embargo su proceso de fabricación es contaminante, sobre todo si procede de China, donde las leyes de protección del medio ambiente y los trabajadores son muy poco exigentes. Además, debe ser transportado desde muy lejos, con lo que su huella de carbono aumenta. Por último, su reciclaje es difícil, y si se produce requiere un proceso que implica la emisión de gases contaminantes.

Si eliges un árbol de plástico asegúrate de que es de calidad suficiente para que dure toda la vida, y no de materiales baratos que se degradan, se despegan, se oxidan o se pelan fácilmente al poner y quitar los adornos.

Hasta que ahorres para comprar un árbol de Navidad de calidad, tal vez quieras optar por alguna de las ideas que se enlazan al final de este post. Ahorrar y esperar son, además, formas de evitar el consumo compulsivo, de asegurarte que quieres de verdad lo que compras y de tener tiempo para valorar las mejores opciones.

Los árboles naturales parecen presentar más ventajas ambientales. Para empezar su producción no solo no es dañina, sino que supone la absorción de CO2 por parte del árbol durante su periodo de crecimiento en el vivero. Se suelen cultivar en zonas rurales, contribuyendo al desarrollo económico de la zona y a la generación de empleos verdes. Por último, su reciclaje es completo (transformación en compost) y no deja residuos dañinos. Como inconveniente podríamos citar el escaso éxito de la replantación si el árbol no ha estado bien cuidado en casa o si se ha comprado con las raíces incompletas.

Un árbol natural requiere un regado regular y humedad, estar alejado de la calefacción y evitar las oscilaciones bruscas de temperatura. Si no puede ser replantado no lo tires: avisa al servicio municipal de recogida o devuélvelo al vivero.

Aunque hay quien sostiene que la mejor opción es un árbol hecho de materiales reciclados. Aquí tienes algunas ideas. Este tipo de alternativas pueden ser muy divertidas y te permiten lucir cada año un árbol de Navidad diferente. Busca más tutoriales en internet, hay montones de ideas. Pero recuerda que, para que se considere realmente como reciclado, debe estar compuesto de material de desecho y no de elementos comprados a propósito para realizarlo. Si quieres reducir la huella ecológica de tu árbol hecho a mano, vigila también el uso excesivo de pinturas, pegamentos y elementos metálicos.

¿Por qué tipo de árbol te decantas?